Cómo llegar a un doctorado en economía en EEUU y no morir en el intento

Probablemente, muchos de los lectores de este blog estén pensando en continuar sus estudios en alguna universidad extranjera. En esta entrada, voy a explicar los pasos básicos a seguir para aplicar desde Argentina y otros países de la región a programas de doctorado en EE.UU. Es un proceso bastante estandarizado pero un tanto tedioso, por lo que creo que la información va a ser útil para varios. A no desanimar, que el trabajo es mucho pero la recompensa es grande.

Voy a organizar los pasos en tres: Primero, lo que hay que hacer antes del proceso de postulación; Segundo, lo que implica en sí el proceso de admisión; Tercero, que hacer una vez terminada las aplicaciones. En cada uno de estos iré respondiendo pequeñas preguntas e ítems.

1. ¿Qué hacer antes de postularse?

Básicamente, estudiar algo. Pasar desde el secundario hacia un doctorado no es factible (salvo para Guillermo Calvo, ver aqui). En Argentina hay muy buenos programas que dejan a sus alumnos en condiciones óptimas para afrontar el doctorado. En mi experiencia, la mayoría de los alumnos de doctorado que conocí en EE.UU y que estudiaron previamente en Argentina, pasaron por la Universidad Torcuato Di Tella o por la Universidad de San Andrés. Hay también muchas otras excelentes universidades, pero creo que estas dos (y también con sus matices) tienen más tradición y experiencia en mandar sus alumnos a programas en el exterior. Por ejemplo, aquí pueden encontrar los resultados de los alumnos de la Universidad Di Tella en los últimos años. Para los lectores Colombianos recomendamos la Universidad de los Andes, La U de Chile y la Católica en Santiago, el ITAM en México y EPGE en la Fundacion Getulio Vargas en Rio.

¿Es necesario hacer una maestría? Probablemente no sea indispensable, pero si una buena idea. Personalmente, encuentro dos motivos. Primero, durante el posgrado se adquieren muchos conocimientos nuevos que son extremadamente útiles para el doctorado, sobre todo durante el primer año. Esto, a la vez, hace la experiencia del doctorado más productiva y placentera. Mi experiencia de haber estudiado dos años en la U DI Tella ha sido excelente y sumamente recomendable. Segundo, a la hora de postularte a un doctorado vas a estar compitiendo con muchas otras personas de todas partes del mundo que quieren también entrar a buenos programas. Tener una maestría te pone en una mejor posición, sobre todo porque es muy probable que tus cartas de recomendación sean mejores si hiciste un posgrado.

¿Puedo postularme a un programa de economía si estudie otra cosa? Si. Hay muchos alumnos que logran entrar con estudios previos en matemática o física, como así también en historia o política. Para estos casos, la idea de hacer una buena maestría en economía me parece aun más recomendable.

¿Es importante mi promedio? Si. No es el único determinante de tu futura admisión, y probablemente tampoco sea el más importante, pero mientras más alto sea tu promedio mejor. Principalmente, creo que revela cierta información de cuan aplicado sos como estudiante y de cómo sos en relación a un grupo de tus pares.

¿A que cosa le prestan mas atención en la selección de candidatos? Las cartas de recomendación probablemente sean el aspecto mas determinante para entrar a un buen programa de doctorado. Si un profesor como Juan Pablo Nicolini, Andy Neumeyer o Sebastián Galiani (para mencionar gente de este blog) escriben una carta diciendo que te destacaste en una serie de cursos o trabajos de investigación, y que tenés una gran potencial para una gran cursada en el doctorado y una buena tesis, los más probable es que te admitan en una buena universidad y te den una beca. A la hora de elegir quien te va a recomendar es importante que la persona te conozca bien, que pueda escribir honestamente que te vas a destacar y que sea alguien creíble (con una historia de alumnos referidos a los que les haya ido bien).  Cartas de recomendación de personajes muy importantes (como políticos, banqueros, o poderosos funcionarios públicos) que no puedan escribir sobre tu rendimiento académico y potencial intelectual con un gran conocimiento de tus habilidades restan más de lo que suman. Una carta efectiva es una evaluación cándida y honesta de tu potencial intelectual, basada en tu rendimiento anterior y que describa aspectos de tu persona que no están reflejadas en las notas de los exámenes. Aquí es donde es importante la maestría que elegiste y tu promedio porque estas cosas van a estar reflejadas en las cartas.

2. ¿Qué tengo que hacer para postularme a un doctorado?

Básicamente, cuatro cosas: rendir dos exámenes estandarizados, escribir unos ensayos explicando tus motivaciones, conseguir cartas de recomendación, y llenar una enormidad de formularios. Explico cada ítem a continuación.

Exámenes estandarizados. Todas las universidades exigen rendir el GRE, que es un test de inteligencia. Tiene tres partes: una de escritura, una de lectura y una de matemática. Esta última es la más importante para aplicar a programas de economía y generalmente se espera que los alumnos obtengan un resultado mayor a 780 (sobre 800). Es verdaderamente fácil, esencialmente matemática de secundario y lo único que puede generar inconvenientes son los nervios. Por eso, lo mejor que se puede hacer es practicar. Lo ideal es empezar preparando el GRE con algún libro (por ejemplo este), y hacer los ejercicios y los exámenes de práctica que estén ahí. Después, usar alguna (o todas) de las fuentes de exámenes que hay. Recomiendo dos que me fueron útiles: GREbible y sobre todo 800 score. También, una vez que se registraron para el examen, se pueden bajar prácticas de muestra que son muy útiles.

El segundo examen es el TOEFL, un examen de idioma. Es fácil y no debería causar grandes problemas. En este link pueden encontrar un buen libro para preparar el examen.

Ensayos. Los ensayos generalmente incluyen tres cosas: Primero, una explicación de por qué estas interesado en hacer un doctorado; Segundo, que cualidades te hacen un buen candidato; Tercero, que ves de interesante del programa en particular al que estas aplicando. Si bien necesitas un ensayo para cada universidad a la que apliques, generalmente los dos primeros ítems no cambian demasiado. Leer ensayos previos y compartir el tuyo con tus profesores es una buena idea.

Cartas de recomendación. Como escribí arriba, esta es la parte más importante de la aplicación. En general necesitas tres cartas de recomendación. Preferentemente, de profesores que te conozcan y puedan argumentar que sos un buen candidato. A riesgo de sonar repetitivo, si un profesor, respetado en el ambiente académico, escribe una carta diciendo que sos un excelente alumno, que espera mucho de vos y que deberían aceptarte…. sería muy raro que no te aceptaran.

Formularios. Cada universidad pide que los alumnos llenen unos formularios on-line. Allí incluís información como nombres y nacionalidad, pero también los promedios de tus estudios previos y las notas de los exámenes estandarizados. Salvo alguna excepción, los ensayos se adjuntan on-line en estos formularios. Si bien es un proceso simple, solo llenar estos formularios puede llevar tiempo. Naturalmente, mientras mayor el número de postulaciones que hagas, más tiempo va a tomar.

¿A qué programas tengo que postularme? Seguramente, algunos programas van a interesarte más que otros. Dado que vas a tomarte el esfuerzo y el tiempo de hacer un doctorado, te recomiendo aplicar solo a buenos programas. Afortunadamente, hay muchas buenas universidades y es factible que logres ser admitido en alguno de estos programas. Creo que lo mejor es hablarlo con los profesores que escribieron tus cartas de recomendación y discutir con ellos a que programas postularte. El consejo que yo recibí en ese momento fue el siguiente: “solamente no apliques a un programa al que bajo ningún punto de vista irías”.

Además, hay un costo económico de aplicar. Entre el envió de documentos y la tarifa por aplicar, en promedio cuesta USD110 cada universidad.

3. ¿Qué hacer una vez terminada las solicitudes de admisión?

Diría que hay tres cosas. Primero: asegúrate de que todos los documentos llegaron a destino. Sobre todo las cartas de recomendación, que muchas veces las envían los profesores por separado y tardan más en llegar. Segundo, si bien la mayoría de los programas ofrecen estipendios, quizás averiguar sobre alternativas de financiamiento puede ser útil. Tercero, disfruta los últimos meses antes de empezar, por qué lo que se viene es intenso.

Para concluir, si tenes curiosidad intelectual y sentís una genuina satisfacción por aprender, creo que aplicar a un doctorado es una excelente decisión. Además, aunque sea un proceso tedioso, es factible que logres entrar a un programa interesante. En pocos años vas a convertirte en un experto en tu tópico de investigación; vas a poder discutir ideas con personas extremadamente interesantes y apasionadas por su trabajo; y vas a poder dedicar tu tiempo a pensar y resolver preguntas que vos encuentres atractivas. Es cierto que es mucho trabajo, pero la sensación es muy gratificante. Podes preguntarle a tus profesores, y apuesto que todos ellos van a recordar sus años de alumnos de doctorado con gran alegría.