La explicación de la performance de la economía argentina está generando un intenso debate. Por un lado están quienes argumentan que el resurgimiento que tuvo la economía luego de la monumental crisis del 2001/2002 es simplemente milagroso. Quienes adhieren a esta visión sugieren que la implementación de políticas heteródoxas de los últimos años ha sido en mayor o menor medida responsables de esta performance.
Por otro lado están quienes sostienen que Argentina ha perdido una oportunidad histórica para consolidarse en una senda razonable de crecimiento sostenido conjuntamente con una mejora equitativa que permita una sociedad más igualitaria. Estos por su parte creen que la performance argentina fue buena como resultado de haber sido favorecida por circunstancias externas extremadamente favorables y que esto sucedió a pesar de la las políticas implementadas durante los últimos años.
Quien tiene razón? Es difícil determinarlo porque ambas afirmaciones tienen parte de verdad como intentaré ilustrar a continuación. Por un lado, la economía argentina ha tenido una buena performance en los últimos años, tanto en términos de PBI per cápita como en alguno de sus indicadores distributivos. Por otro lado, esta buena performance no es exclusiva de nuestra economía y efectivamente la evolución de los términos de intercambio ha favorecido de manera extraordinaria a nuestra economía desde la crisis del 2011/2002.
Antes de continuar desearia aclarar que, si bien tengo una opinión muy negativa sobre la política oficial del manejo estadístico, no voy a cuestionar la validez de los datos que surgen de las aparentemente dudosas agencias estadísticas argentinas.
1. Argentina y su Performance Relativa
El siguiente gráfico muestra la evolución de la PBI per cápita argentino para los últimos 20 años. Como una consecuencia natural de la brutal caída generada por la crisis, la economía comenzó a recuperarse a partir del 2003, aproximadamente. Pero más que esto, para fines del 2005 el producto per cápita comenzaba a superar los niveles registrados en 1998, su anterior pico histórico. Este proceso no se ha detenido, salvo por períodos muy breves, hasta la actualidad. Esto es evidencia del milagro argentino? Para intentar responder esto, analicemos muy brevemente lo que sucedió con otras economías de la región. En particular, podemos observar que las economías de Brasil, Chile y Uruguay han tenido también una buena performance donde tan solo la economía uruguaya sufrió la caída del 2001/2002 para luego recuperarse fuertemente como la argentina. Hubo otras economías de la región, com por ejemplo Paraguay, que mostraron un crecimiento muy modesto.
Fuente: CEPAL
Para determinar si esto ha sido un fenómeno exclusivo de los argentinos, la pregunta relevante entonces es que ha sucedido con la evolución relativa. El siguiente gráfico muestra la evolución del PBI per cápita de diferentes países en relación al argentino. Argenitna tuvo mejoras significativas con ciertas economías de la región, como por ejemplo Bolivia, Paraguay y Perú. Sin embargo, lo peculiar aquí es que para los casos de Brasil y Chile, recién ahora se está volviendo a los niveles relativos de 1998, su anterior pico. Para el caso uruguayo, incluso, la tendencia se habría revertido durante los últimos años y habrían ganado terreno con un PBI per cápita relativo por encima de aquel de 1998. Por lo tanto, según este criterio, el fenómeno argentino se podría deber mas a una reversión a los niveles históricos que a una performance relativa superior a otros países de la región.
Fuente: CEPAL
2. Viento de Cola o la Cola al Viento?
Otro de los argumentos que quiero brevemente analizar es aquel que dice que la economía argentina se vio particularmente fuertemente beneficiada por una evolución favorable de los términos de intercambio. El siguiente gráfico muestra la evolución de los mismos para nuestra economía y un índice para el resto de los países latinoamericanos y el MERCOSUR. En los tres casos la tendencia positiva comienza en 2002 para detenerse en 2008/2009. Por lo tanto, Argentina no ha sido particularmente favorecida en este aspecto, tanto cuando lo comparamos con el resto de los países de la región en su conjunto como si la comparamos con sus socios del MERCOSUR.
Fuente: CEPAL
Ahora bien, yendo un poco más al detalle, veamos que ha sucedido con los países que hemos mencionado antes en relación a su performance relativa. El más beneficiado ha sido Chile, donde la evolución de sus términos de intercambio ha sido fuertemente influenciada por el precio del cobre. Brasil muestra una evolución benévola que es similar a la argentina para los últimos años. El caso más llamativo es el uruguayo que ha tenido recientemente una mejor performance relativa con respecto a nuestra economía y sin embargo la evolución de los términos de intercambio parece no haberlos favorecido desde la crisis 2001/2002. A diferencia de los demás países, sin embargo, los términos de intercambio uruguayos no parecerían estar deteriorándose en la actualidad como si sucedería para el resto de los países.
Fuente: CEPAL
3. Evolución de Indicadores de Igualdad
Para concluir, analicemos brevemente la dinámica de algún indicador distributivo. La figura de abajo ilustra la evolución de los coeficientes de Gini para Argentina, Brasil, Chile y Uruguay (recordemos de manera brutal: cuanto más bajo este coeficiente, mejor distribución). Esta sugiere que durante los últimos años la economía argentina se vuelto más igualitaria de acuerdo a este índice. Esta es una dinámica que en menor medida también está presente para las economías de Brasil y Chile. La economía uruguaya ha tenido históricamente índices muy bajos relativo no solo a los países de la región sino con respecto al resto del mundo. Entonces, la mejora no es exclusiva para Argentina aunque en nuestro país parece haber sido más intensa.
Coeficiente de Gini
Fuente: CEDLAS
4. Reflexiones Finales
La economía argentina, como la de otros países de la region (excepto para el caso uruguayo), ha sido beneficida por una evolución muy favorable de sus términos de intercambio durante los últimos años. Por otro lado, la buena performance de la economía argentina esta en sintonía con la evolución del resto de las economías prosperas de la región y podría tan solo estar evidenciando cierta reversion a los niveles históricos.
El calificativo de “milagro” en este contexto debe estar, imagino, vinculado a la escases relativa de eventos de este tipo. De acuerdo al análisis (absolutamente descriptivo, teoría económica para cuando?) podemos concluir: o estamos en un período muy particular repleto de milagros (con algunos mas llamativos que el argentino, como sería el caso uruguayo), o todavia no podemos contestar esa pregunta y debemos esperar para ponernos a rezar en agradecimiento.
Emilio ¿los PBI cómo están medidos? ¿PPP? Me sorprende Chile tan abajo de Argentina y Uruguay.
Tenes razon Lucas, a mi tambien me sorprendio.
Es asi: CEPAL calcula GDP en dolares a precios constantes del 2000 por objeto del gasto. WB tiene la serie del GDP per capita a dolares del 2000 y a primera vista me parecieron parecidas pero Constantino abajo dice que no. Ahora sigo con el por si te queres prender.
Una excusa, no del todo buena y educada, es que yo queria mirar mas la dinamica que los niveles. Pero esto se puede ver afectado tambien con la seria WB, tengo que mirar. Gracias.
No no, la serie coincide con la de dolares constantes de 2000. Las que son distintas son a PPP o dolares corrientes.
chequeado.comchequeado.comEmilio,
Entiendo que no es el objetivo de tu nota, pero creo que si los datos provistos por CEPAL para el análisis tuvieran indicadores de inflación, la performance sería distinta (menor crecimiento en los últimos años y mayor desigualdad).
En http://www.chequeado.com hay mucho material al respecto.
http://www.chequeado.com/component/search/?searchword=inflaci%C3%B3n&ordering=newest&searchphrase=all&limit=100&areas%5B0%5D=content
Saludos y gracias por compartir ideas!!!
Gracias Ivan.
Como dije al ppio, noes mi prioridad cuestionar la veracidad de los datos que surgen de informacion del gobierno (sobre los cuales tengo una opinion muy pero muy negativa).
Ahora miro lo tuyo.
La correlación de nuestra economía con los países de la región (y con la de países con la misma estructura productiva) es un hecho innegable.
Se puede analizar a lo largo de la décadas sin márgende confusión.
Tampoco se puede negar que los números de nuestra economía están inflados, basta con seguir los indicadores de consumo de energía por ejemplo.
Por otra parte el consumo de hierro y acero per-cápita está por debajo de los máximos de la década del 90, repito, por debajo.
Me parece que eso indicadores «físicos» son mejores herramientas para analizar la evolución real de nuestra economía en los últimos años.
Eduardo, tulizamos lo que entiendo son practica comun para uniformar el lenguaje. Gracias por tu comentario
La correlación de nuestra economía con los países de la región (y con la de países con la misma estructura productiva) es un hecho innegable.
Se puede analizar a lo largo de la décadas sin márgende confusión.
Tampoco se puede negar que los números de nuestra economía están inflados, basta con seguir los indicadores de consumo de energía por ejemplo.
Por otra parte el consumo de hierro y acero per-cápita está por debajo de los máximos de la década del 90, repito, por debajo.
Me parece que eso indicadores «físicos» son mejores herramientas para analizar la evolución real de nuestra economía en los últimos años.
Emilio, creo que la pregunta que haces es muy atinada. Nunca entendí bien como se escribe la historia de la política económica. Pero el caso del Kirchenerismo es un muy buen ejemplo. Hace poco respondí esto en un reportaje:
… la Argentina no tuvo un crecimiento tan espectacular como quiere hacernos creer el Gobierno. Hay que tener en cuenta que entre 1998 y 2002, el PBI había caído un 20%. Si se considera esta baja, el crecimiento del producto potencial durante la gestión de los Kirchner no fue nada del otro mundo. … La Argentina no solamente no creció a tasas chinas, sino que tendencialmente lo hizo por debajo del ritmo al que se expandieron nuestros vecinos más cercanos.
Cuando uno habla del crecimiento de un período, debería hacerlo sobre el crecimiento del producto potencial. Esto sería lo mínimo que deberíamos hacer. Rescribir la historia económica hablando del crecimiento potencial, no del simple cambio entre puntas del producto registrado. Pues si un gobierno sube justo después de que el producto cayó 20%, muy probablemente pueda mostrar altas tasas de crecimiento.
Luego, esta la otra cuestión. Una vez que medimos el cambio en el producto potencial, ¿Qué lo ha causado? Esta es una pregunta muy difícil, pues siempre es complicado construir el escenario contra fáctico. Vos haces un buen intento acá. Sería muy interesante hacer esta cuenta:
Tomar el producto potencial para los países de LAC y regresarlo, en un modelo de panel, con efectos fijos por país y año, contra los términos de intercambio. Y luego comparar las series de residuos! No digo que esto resuelva todas las cuestiones, pero me gustaría ver esas series!
En cualquier caso, finalmente, como vos decís, al final del día, uno tiene que tener un modelo para hacer historia.
Tratando de extraer una tendencia «a ojo» en el gráfico 1 (método nada científico, pero por cierto, sumamente intuitivo, como el mismo Prescott reconoció en su momento) no se ve, en absoluto, que la pendiente de una posible línea de tendencia sea menor o incluso igual a la los restantes países (excepto Uruguay, que tendría más o menos la misma que Argentina). Por ende, si se tomara a la tendencia (gruesamente extraída, admito) como PBI potencial, no parece sostenerse éso de que el PBI potencial haya crecido menos que el del resto de los países.
Muy lindo post. Estoy de acuerdo en ser muy cauteloso con calificar el actual proceso de crecimiento de por ej. Uru y Arg como “milagro”.
Si miramos los datos de GDP per worker en international dollars (de la ultima versión de PWT que por ahora tiene datos desde 1950 hasta 2007) de Arg, Uru y Bra relativo a USA, vemos la real decadencia de nuestras economías en ese periodo y lo mucho que resta por crecer para poder catalogar este proceso reciente de crecimiento como «milagro». Solo vemos un tímido catch up con USA (no en el caso de Brasil) que no es suficiente ni para alcanzar los niveles relativos que ostentábamos en 1950. Para “milagro” tenemos, por ej. Korea, cuyo GDP per worker era 14% del de USA en 1950 y pasa a ser casi el 60% en 2007.
El catchup relevante es con EEUU, o con países de similar o mayor nivel de ingreso per capita. Por lo tanto, las noticias son buenas. En cuanto a lo de «milagro», la cuestión me parece semántica y no precisamente semántica muy relevante para la teoría económica, más bien para el marketing (pro o contra) de las políticas. Nadie deja de etiquetar como «milagro» el crecimiento brasileño ente 1968 y 1979, pese a que duró apenas una década. Y que le restaba mucho más distancia que recuperar respecto a EEUU.
De acuerdo, el benchmark es USA y por eso me refería a GDP per worker relativo a USA.
Lo de los ‘milagros’ o sucesos de crecimiento rápido, no lo veo como algo de ‘marketing de políticas’ ya que ha dado lugar a numerosos papers (Lucas (1993), Parente and Prescott (1994), Manuelli and Seshadri (2010), por nombrar algunos) que tratan de desarrollar modelos teóricos que sean consistentes con los ‘milagros’ que observamos en los datos. Así,con rigurosidad científica, se aprende sobre estos fenómenos y quizás sobre las políticas que favorecen la ocurrencia de los mismos.
Ok, si el concepto es aceleración del crecimiento.
Mi cuestionamiento básico era que no parece muy científico decir que el «milagro brasileño» es uno de esos sucesos mientras que lo que estamos viviendo no lo es. Creo que ese punto se mantiene.
Podemos convenir que una aceleración del PBI de un par de años no es relevante, pero de ahí a sostener que sólo aceleraciones de 30 o 40 años (como la mencionada de Corea del Sur) son las únicas relevantes para aprender algo sobre las políticas, es un criterio que puede ser excesivamente restrictivo. Habría muy pocos otros casos, menos de 10 seguramente. Con casi 200 países en el mundo ¿queremos extraer lecciones de política SOLO analizando esos casos? ¿Qué tan válidas serían?
Lateralmente, hay literatura empírica como p.ej. Hausmann, Pritchett y Rodrik, 2005, que identifica más de 80 episodios de aceleración (¿milagros?) desde 1950, en el cual, por increíble que nos parezca, Uruguay figura dos veces como caso, a partir del 74 y a partir del 89 (si bien en el último caso más al borde de la significación).
Hola, como dice Mr Llach, me resulto extranio que Chile este tan abajo de Argentina en terminos de PBI per capita.
Me tome la libertad de reproducir esos datos usando datos del WDI para distintas definiciones de PBI, y encontre lo siguiente (tengo datos solo hasta 2009)
1) El grafico que muestra Emilio parece ser PBI per-capita medido a dolares de 2000
2) Si uno mide PBI per-capita a dolares corrientes, Chile esta bastante por arriba de Argentina. Claramente, para que esto sea consistente con (1), los deflactores tienen que ser distintos. No se de donde viene esa diferencia.
3) Si uno mide PBI per capita a PPP (constantes de 2005), Chile aparece comodamente arriba de Argentina entre 2000 y 2007, pero 2008 y 2009 tienen practicamente el mismo valor.
Con gusto subiria los graficos, pero no se si se puede.
Saludos.
Emilio,
muy interesante el ejercicio, solo quiero dejar planteada una inquietud. Tengo la impresión que la mejora en los términos de intercambio de Argentina en años recientes es superior a la que muestra el gráfico. Los datos utilizados corresponden al índice de los términos de intercambio de bienes y servicios, que alcanza un valor de 107 para el 2009, según reporta CEPAL. Si hubiésemos optado por utilizar el índice de los términos de intercambio de bienes (exclusivamente), el valor para el 2009 sería de 127. Es decir, el hecho de incluir los servicios hace que el índice en lugar de aumentar un 27% entre el 2000 y el 2009, solo aumente el 7%. Conceptualmente, el indice elegido en el post debería ser el adecuado, sin embargo, me llama la atención que la brecha entre las dos series de términos de intercambio sea -en perspectiva histórica- tan grande (ver link). Es un tema a profundizar …
https://docs.google.com/leaf?id=0B9W5TTMZVZ_hODU4MGZiNTQtN2JkNi00M2RjLWJiNGItZGI5MWJkNDExM2Rh&hl=en&authkey=CI28x6gK
Yo sacaría como conclusión que si las políticas económicas de todos estos países son tan diferentes como algunas opiniones nos quieren hacer creer, pareciera que esa diferencia no tiene mucho que ver con el desempeño de las economías, máxime cuando la mayoría de esas opiniones (¿la ortodoxia?, ¿la evaluación de los mercados financieros?) no pone precisamente a Argentina en el primer lugar (como sí ocurre con el desempeño) sino más bien en el último.
Sobre el último comentario, de Nelson, una cosa que «se sabe» desde hace tiempo es que en América Latina una parte muy importante del desempeño de las economías es «factores externos» como la entrada de capitales (la versión de moda de esta idea es lo de los sudden stops, pero hay ejemplos viejos como el paper de Federico Echenique y Alvaro Forteza «Are Stabilization Programs Expansionary», que decía que la razón por la cual los planes de estabilización basados en tipo de cambio eran expansivos era porque se adoptaban cuando había viento de cola).
Entonces, veremos a todos los países de la región comportarse de manera similar en períodos más o menos extendidos. Buenas y malas políticas, me parece, afectan el desempeño de largo plazo (un poco en línea con lo que dice Sebastián Galiani). Por otro lado, malas políticas (criticadas por la «ortodoxia») pueden aumentar mucho el PBI en el corto plazo (fijar tarifas bajas, que desestimulan la inversión de las «utilities», y hacen crema tu stock de capital) para matarte en el largo plazo.
Lo de Galiani lo comenté directamente en su comentario.
El paper de Etchenique y Forteza no es buena referencia, pues su econometría está mal. Igual, estamos de acuerdo en el punto. Pero lo más importante es ¿cómo se comportaron estos mismos países en períodos similares de condiciones externas favorables respecto a otros países de AL? A ojo de buen cubero, Argentina y Uruguay no estaban a la cabeza del desempeño. De dónde, la posición que sostiene que algo nuevo y positivo está pasando, además de las condiciones externas favorables, tiene algo de que asirse empíricamente. No será concluyente (la conclusión definitiva es cosa de las ciencias formales), pero habría que rendirse o por lo menos dudar algo más de lo que me parece es habitual.
Respecto a «Por otro lado, malas políticas (criticadas por la “ortodoxia”) pueden aumentar mucho el PBI en el corto plazo (fijar tarifas bajas, que desestimulan la inversión de las “utilities”, y hacen crema tu stock de capital) para matarte en el largo plazo.», dos cosas:
1. teóricamene sí, pero dadas las tasas de inversión que se observan en varios países de AL, y en particular, de Argentina, es difícil sostener que el capital esté disminuyendo (se podría decir, es cierto, que podría ser mayor). Curiosamente, si se ven bien las tasas de inversión de Brasil, y en especial las referidas a infraestructura, no se podría decir lo mismo. ¿Está diciendo algo la supuesta ortodoxia sobre esos problemas brasileños?
2. el período analizado abarca casi 10 años y podría ser insuficiente para considerarlo largo plazo, pero claramene es más que un ciclo económico. Es claro que «largo plazo» es un concepto vinculado a condiciones teóricas y no a un período de tiempo histórico, pero si no se le pone una referencia de tiempo concreta, se corre el serio riesgo de que las ideas sean empíricamente incontrastables, o sea, acientíficas. La sugerencia metodológica de Gagliani de estudiar el PBI potencial es una forma de evitar eso. Claro que por lo que se ve, como dije en el comentario a Gagliani, el PBI potencial, lejos de disminuir, está aumentando, e incluso aumentando más en Argentina y Uruguay que en el resto.
Los comentarios y datos de este post dejan en claro dos cosas que creo que hay que perseverar muy popperianamente para no reconocer: para lo que aparece frecuentemente en la prensa especializada, lo que relucen Chile (en nivel pero algo menos :en ritmo también) y Brasil (en nivel y en ritmo) no es tanto como lo que Argentina y Uruguay muestran últimamente.
Excelente post, Emilio. Ahora bien, ¿podrías incorporar el cuadro que colgaron en «1000 palabras» sobre este tema? Da una linda idea del catch up y de la performance relativa de nuestros países con respecto a EE.UU.
Emilio, muy buen post.
Le falta incorporar al análisis la evolución de la deuda, que me parece es crucial para analizar este tema.
Comparto con lo que comentaban varios de que la Argentina del 2003 arrancó con un piso más bajo (respecto del 98´), pero me parece que el peso de la deuda en realidad la dejaba mucho peor parada que al resto de la región.
Saludos.
Alberto.