Nuevos datos oficiales de educación (2013): entre la privatización y el estancamiento

El  Ministerio de Educación de la Nación acaba de publicar su última serie de datos oficiales correspondientes al período 2013, lo que permite obtener más evidencia para completar un balance de los efectos de las políticas educativas implementadas desde 2003, especialmente para el nivel inicial y para los niveles educativos obligatorios (primario y secundario). Acá  les dejamos un resumen de un análisis un poco más extenso que pueden encontrar en este  link.

Los nuevos datos corroboran dos tendencias para la década que ya han sido analizados en trabajos anteriores:

1) El significativo aumento de la matrícula de la educación privada en todos los niveles de enseñanza y en todas las provincias argentinas. 2) Respecto de la educación obligatoria se observa una estabilización de la matrícula de la escuela primaria (esperemos que sólo por motivos demográficos) y un aumento acotado e insuficiente de los alumnos en la escuela media, especialmente de la estatal. A esto se suma la notoria expansión del nivel inicial, donde los valores de la participación de la educación privada son los mayores del sistema.

EL ANÁLISIS DE LOS DATOS HASTA 2013

1.- La pérdida de alumnos en las escuelas primarias públicas post 2003: nuevo récord en 2013

La escuela primaria pública argentina sigue con su tendencia de pérdida constante de alumnos iniciada en 2003, pero en 2013 registra un nuevo récord de caída con 49.094 chicos menos respecto de 2012, siendo que el récord previo fue el año anterior con 45.336 chicos menos de 2011 a 2012. Desde 2003 se acumula una pérdida de 301.907 alumnos (-8.2%) mientras las escuelas primarias privadas ganaron, para el mismo período, 244.482 alumnos (+25.6%).

En lo que respecta al primer grado de primaria, de 2012 a 2013 se registra una caída total del 4.6% en la cantidad de inscriptos de las escuelas primarias públicas, con algunos casos muy llamativos como la provincias de Chaco (-14.4%), San Luis (-13.1%), Santiago del Estero (-11.3%) y Catamarca (-9%) que merecen un estudio en profundidad.

Alerta: la ocurrencia de este marcado fenómeno en 2013 en algunas de estas provincias hace temer la posibilidad de que no se trate solamente de un pasaje al sector privado. Altas tasas de natalidad sumadas a los importantes niveles de pobreza e indigencia (pese al INDEC) muchas veces en entornos rurales y/o aborígenes permite al menos alertar respecto de una probable vuelta a la desescolarización de algunos sectores sociales marginados o empobrecidos. Futuros estudios deberán dirimir la cuestión.

Casi todas las provincias siguen perdiendo alumnos de primaria, especialmente aquellas que desde 2003 asumen un carácter crítico, como ya mostramos en este post de Foco Económico.

2.- Menos alumnos en el primer año de la escuela secundaria en 2013

En cuanto a la escuela secundaria pública, si bien se advierte un incremento total de 225.689 alumnos desde 2003 (+8.9%), la escuela secundaria privada avanzó en el mismo período un 16.8% incorporando 158.240 alumnos adicionales. O sea, durante la década, el 42% del crecimiento de la secundaria fue a escuelas privadas

Para el año 2013 se destaca una caída en la matriculación total para el primer año de la secundaria en escuelas públicas del 0.9% respecto de 2012. En algunos casos provinciales la magnitud de la caída interanual es llamativa y preocupante: en Chaco el primer año de la secundaria se desploma solo en un año 6% y en Santa Fe 4.3%, seis y cuatro veces más que el promedio nacional, respectivamente.

Con respecto a la finalización de los estudios secundarios, para 2013 se observa un aumento del número de egresados en comparación a 2012: se pasa de 285.699 a 302.470. Sin embargo, de esos 17.771 egresados adicionales el 76% se corresponde a tan solo 3 provincias: 10.400 a la Provincia de Buenos Aires (62%), 1.604 a Santa Fe (9%) y 817 a Mendoza (5%); la situación en el resto de las jurisdicciones, incluso las provincias “grandes” que incluyen altas matrículas como CABA, Salta, Córdoba y Tucumán, es poco auspiciosa.

Llamativamente, de los 302.470 egresados del secundario del año 2013, el 40% corresponde a escuelas privadas aun cuando este sector representa el 28.4% de la matrícula total para el nivel. Es decir, en 2013 un alumno de escuela privada tuvo un 35% más de probabilidad de terminar con éxito la secundaria que uno de escuela pública mientras que en 2004 esa probabilidad era superior en apenas un 18%. En otras palabras, las chances de un alumno de escuela secundaria estatal de conseguir su diploma en 2013 bajaron a la mitad respecto de sus chances al inicio de la década.

Los datos de 2013 permiten evaluar con más precisión el impacto la obligatoriedad del secundario establecida por la Ley de Educación Nacional de 2006. Entre 2007 y 2013 la matrícula pública del secundario aumentó un 11.3% (280.431 nuevos alumnos) mientras para el período  previo a la obligatoriedad (1994-2006) había crecido 27.0%. Parece revertirse, no obstante, el estancamiento en la matriculación secundaria que caracterizó al período 2000-2006 aunque estamos en presencia de un virtual nuevo estancamiento, sobre todo teniendo en cuenta la enorme cantidad de adolescentes que no terminan sus estudios secundarios en escuelas públicas. En Foco Económico ya mostramos tendencias al respecto en este post.

3.- Más alumnos en el nivel inicial

Con respecto al nivel inicial, si bien la matriculación en establecimientos públicos aumentó un 21.7% en el período 2003-2013, continúa siendo el nivel con mayor presencia privada (33.5%). En el mismo período, el sector privado se expandió un 56.9%.

4.-Conclusiones de la década: privatización, expansión acotada y estancamiento

Los datos demuestran que la matrícula de la educación primaria se encuentra estancada (de hecho llegó a su máximo nivel de cobertura) y la escuela pública no cesa de perder alumnos mientras la privada los gana.

Se observa también una escuela secundaria que viene creciendo cada vez menos y que en el último año muestra crecimiento negativo de sus alumnos de primer año. Además, disminuyeron las probabilidades de un estudiante secundario público de obtener su diploma respecto de las que tenía en 2004. A esto se suma un nivel inicial que crece con una amplia oferta privada.

La educación privada también crece en la educación especial e incluso -y muy llamativamente- en la educación de adultos, cosa muy poco frecuente en otros países.

En resumen, esta combinación de privatización de la educación, expansión acotada  y virtual estancamiento del crecimiento de la matrícula en la educación obligatoria (especialmente en la de gestión pública) parecen marcar el signo de la década.

Las explicaciones acerca de cómo la política educativa contribuyó a generar este nuevo y hasta ahora inédito paisaje de la educación argentina quedan para futuros debates.