Comencemos con un simple cuestionario. A continuación le preguntaré por diez cifras que usted no conoce con exactitud; por ejemplo, cuál es la altura del Monte Everest. No quiero que me indique la cifra exacta, tampoco que googlee para encontrarla. Quiero que me dé un intervalo de valores que incluye la cifra en cuestión con una probabilidad del 90%. Si usted no tiene idea, una respuesta posible para el Everest sería “entre 5.000 y 10.000 metros”. Si conoce la cifra aproximada, podría responder “entre 8.800 y 9.000 metros”.
Tome papel y lápiz y vaya anotando el rango de valores para cada una de las cifras que siguen:
- 1: Población de Rusia.
- 2: Año de la declaración de independencia de Hungría.
- 3: Número de ciudades en el mundo con más de 10 millones de habitantes.
- 4: Año de nacimiento de Bernardo O’Higgins.
- 5: Número de sinfonías que compuso Haydn.
- 6: Inflación anual más alta en Chile durante los últimos 30 años.
- 7: Población de Chile en 1960.
- 8: Número de semanas que Marcelo Ríos fue N° 1 del ranking ATP.
- 9: Récord mundial actual en la carrera de 100 metros planos de mujeres.
- 10: Suma del número de campeonatos de primera división ganados por Colo Colo, la U. de Chile y la U. Católica de 2000 en adelante.
Al final de la columna están las cantidades correctas; vea cuántas veces estuvieron dentro del rango que usted dio. En base a experiencias anteriores, los rangos indicados rara vez incluyen la cifra correcta más de cinco veces, en promedio suelen ser solo tres y existen personas extremadamente seguras de sí mismas que no aciertan ninguna vez. Rara cosa, porque lo que uno esperaría es que todos, los que saben mucho y los que saben poco, acierten para 9 de las 10 cantidades.
El ejercicio anterior ilustra el “sesgo de exceso de confianza” en la toma de decisiones bajo incertidumbre, un fenómeno bien documentado en la literatura que combina economía y sicología. Sesgo particularmente relevante en el escenario actual, en el cual las incertidumbres en materia de políticas de salud y económica son las más grandes que la humanidad ha enfrentado en un siglo.
El sesgo de exceso de confianza sugiere que las autoridades sean sumamente conservadoras y cuidadosas en escenarios como el actual. No pretender que lo conocen todo ni que lo saben todo. Dar especial consideración a los escenarios más adversos en sus decisiones, para evitar al máximo que estos se materialicen.
El ministro de Hacienda ha dado muestras claras de aprendizaje rápido en estas materias. Luego de proponer un primer paquete económico insuficiente, esta semana anunció un segundo paquete mucho más ambicioso, que considera transferencias importantes para todos los trabajadores, no solo para quienes tienen acceso al subsidio de cesantía, y que incluye un programa importante para proveer crédito a las pymes. Dejando, además, abierta la posibilidad de ir ajustando estos programas e incorporar nuevas iniciativas de acuerdo con cómo evolucione la crisis.
El caso del ministro de Salud, en cambio, es distinto. Ha optado por una estrategia de cuarentenas selectivas, que se van decretando y levantando en comunas específicas y hasta en partes de comunas. Esta estrategia supone que cuenta con información detallada, precisa y oportuna que no pareciera tener.
Existe incertidumbre enorme respecto de las mediciones de los contagios y del comportamiento del virus. El número de contagios se estima en base a los casos que dan positivo con el test PCR. Tener buenas estimaciones de contagios supone que se está realizando un número suficiente de tests, lo cual no pareciera ser el caso. Entre el 3 y 9 de abril el número de test informados es casi idéntico al de la semana anterior, mientras que el número de contagios aumentó en más de 20%. Además, la volatilidad del número de test realizados sugiere que la gestión de estos podría tener problemas. Por ejemplo, las cifras de contagios del 8 y 9 de abril son casi idénticas (430 y 426), mientras que el número de test correspondientes pasó de 3.269 a 7.962. ¿Cómo se explica que con más del doble de test, de un día para otro, no se detecta un número mayor de contagiados?
Al problema de los test para detectar contagios se agrega que existe una fracción grande, pero incierta, de contagiados asintomáticos o con síntomas muy leves. También existen dudas sobre cuánto más se propagará el virus cuando los contagios pasen cierto umbral en comunas con mayor densidad poblacional que las del sector oriente de la capital, donde se inició la epidemia.
Una estrategia con mayor conciencia de la incertidumbre que se enfrenta contempla cuarentenas para un número mucho mayor de comunas del Gran Santiago y regiones, tal como lo recomendó la mesa de expertos convocada por el Gobierno hace unas semanas. A diferencia de la estrategia seguida por el Ejecutivo, esta no requiere tener cifras precisas a nivel comunal.
Con fenómenos exponenciales, como la epidemia del covid-19, a sabiendas de que las medidas que se toman hoy demoran varias semanas en tener impacto, la estrategia que esta siguiendo el Gobierno arriesga un crecimiento de contagios que no se pueda contener y que termine tensionando más allá de lo razonable los sistemas de salud. Un caso extremo de “sesgo de confianza” en un escenario de incertidumbres nunca antes visto, que podría terminar costando un gran número de vidas.
Respuestas a las preguntas:
- 1: 144,5 millones.
- 2: 1848.
- 3: 38.
- 4: 1778.
- 5: 104.
- 6: 25,9%.
- 7: 7.374.715.
- 8: 6.
- 9: 10,49 segundos.
- 10: 25.