El embarazo temprano o adolescente es un fenómeno que ocupa un espacio muy importante dentro del debate público, tanto a nivel nacional como internacional. Muestra de ello, es la unión de esfuerzos que han realizado distintas organizaciones de países, que han dado como resultado lineamientos de política internacional como, por ejemplo, los ODS, la Plataforma de Acción de Beijing, el Programa de Acción de la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo, entre otros.
Al revisar los datos sobre las tasas de embarazo adolescente alrededor del mundo, se puede constatar que es un fenómeno atípicamente alto en regiones como América Latina y África Subsahariana, que tienen tasas de adolescentes madres o embarazadas por primera vez muy superiores a las del resto del mundo: mientras en los países de África del Norte, Asia Occidental y Europa, dicha tasa está alrededor de 6,1%, en América Latina y África Subsahariana los porcentajes oscilan entre el 18,5 y el 25,6, respectivamente (Trujillo et al., 2019). En Colombia, si bien la tasa de fecundidad global viene disminuyendo, la tasa de embarazo adolescente aumentó entre 1990 y el 2005, y después de ese año ha mostrado reducciones leves en 2010 y 2015.
El problema del embarazo temprano radica en una serie de factores que conllevan a que, en primer lugar, tanto las madres como sus hijos, presenten bajos niveles de escolaridad, menores ingresos, peor desempeño dentro del mercado laboral, mayor probabilidad de sufrir violencia intrafamiliar, entre otros (Urdinola y Ospino, 2015; Klepinger et al., 1995). Esto se traduce directamente en la existencia de trampas de pobreza para esos hogares. En segundo lugar, la evidencia médica ha mostrado que existen grandes riesgos de salud, tanto para las madres, como para sus hijos (LeGrand y Mbacké, 1999).
El país y sus instituciones han entendido la complejidad del problema y las distintas iniciativas lideradas por diferentes instituciones a nivel nacional y local fueron articuladas a través del CONPES social 147 de 2012. Este CONPES pretende consolidar sistemas de información y acceso de planificación familiar, aumentar el acceso a servicios de educación y salud, fortalecer la red de apoyo para la garantía del goce de derechos humanos y reproductivos, entre otros.
Sin embargo, en el debate nacional se le ha puesto menos atención a la relación entre la despenalización del aborto y el embarazo temprano. En Colombia, la despenalización del aborto comienza en 2006, con la sentencia c-355 de la Corte Constitucional. Esta sentencia establece la interrupción legal y voluntaria del embarazo (IVE) en tres casos específicos: cuando el feto presenta malformación que hacen inviable la vida de este, en caso de que la salud física o mental de la madre esté en riesgo y cuando el embarazo sea producto de una violación o inseminación artificial sin consentimiento.
Si bien el procedimiento se puede realizar antes de la semana 8 de gestación con medicamentos, según el protocolo de la IVE del Ministerio de Salud este también se puede hacer por medio de un procedimiento ambulatorio, siempre y cuando se cuente con el personal idóneo para el procedimiento y posterior seguimiento (personal que se encuentra en centros de salud y hospitales de II y III nivel).
La literatura que estudia los efectos de la despenalización del aborto en Colombia sobre diferentes resultados posteriores de las mujeres es escasa, y por esa razón hemos conformado un grupo de trabajo en la universidad del rosario sobre el tema. En los primeros pasos de esta línea de trabajo, Jiménez (2017) encuentra una reducción del 13,9% en la tasa de natalidad del país asociada a la despenalización del aborto, y encuentra un comportamiento diferenciado en regiones del país, en donde la región Andina presenta la mayor reducción de su tasa de natalidad, mientras que en la región Caribe ocurre lo contrario.
Siguiendo de cerca la metodología del trabajo de Jiménez (2017), queremos identificar el efecto causal de la despenalización de aborto sobre el embarazo temprano y el peso de los recién nacidos cuyas mamás tienen 19 años o menos. Para esto usamos estadísticas vitales del periodo 1998 – 2018 a nivel municipal y una especificación de diferencia en diferencias. Para cada municipio calculamos cuantos hospitales de II y III nivel tienen en un radio de 20 kilómetros y la variable de tratamiento toma valor de uno si el municipio está por encima de la mediana y cero si está por debajo. Es decir aprovechamos la variación espacial en el acceso a este tipo de hospitales para definir el tratamiento. Se usó esta medida de tratamiento porque los hospitales de II y III nivel son aquellos donde se puede realizar la IVE luego de cinco semanas de gestación debido a la presencia de salas de partos y gineco-obstetras dentro de las mismas.
En la Tabla 1 se reportan los resultados iniciales sobre el logaritmo del número de nacidos vivos de madres entre 10 y 19 años. Después de la despenalización del aborto el número de nacidos vivos de madres en ese grupo de edad se redujo en 20%. Al dividir la muestra entre madres de 10 a 14 años, y de madres entre 15 y 19 años, la magnitud del efecto es superior para el segundo grupo de edad, aunque ambos estimados son negativos y significativos.
Tabla 1. Efecto de la despenalización del aborto en el número de nacidos vivos de madres entre 10 y 19 años (1998-2018)
(1) | (2) | (3) | |
VARIABLES | Log (número de nacidos vivos) | Log (número de nacidos vivos) | Log (número de nacidos vivos) |
Tratamiento | -0.202*** | -0.200*** | -0.201*** |
(0.00966) | (0.00965) | (0.00940) | |
– | – | ||
Efectos fijos de municipio | No | Sí | Sí |
Efectos fijos de año | No | No | Sí |
Constante | 3.820*** | 3.846*** | 3.710*** |
(0.0543) | (0.00551) | (0.0110) | |
Observaciones | 23,142 | 23,142 | 23,142 |
R-cuadrado | 0.028 | 0.079 | |
Número de municipios | 1,120 | 1,120 | 1,120 |
Errores estándar robustos en paréntesis. *** p<0.01, ** p<0.05, * p<0.1 | |||
En la Tabla 2 se reportan el efecto sobre el peso de los niños nacidos de madres entre 10 y 19 años. La literatura económica ha mostrado que el peso al nacer es un predictor importante de varios desenlaces educativos y económicos en la vida adulta de las personas (Figlio et al., 2014). En la base de estadísticas vitales a la que tenemos acceso no se reporta el peso específico de cada niño, sino el número de niños por municipio nacidos en ciertos rangos de peso. Nosotros tomamos el número de niños nacidos con menos de 2500 gramos como una medida de bajo peso al nacer. El número de niños de menos de 2500 gramos con madres entre 10 y 19 años se ha reducido en 14,5%, en promedio.
Tabla 2. Efecto de la despenalización del aborto en el peso de los nacidos vivos de madres entre 10 y 19 años (1998-2018)
(1) | (2) | (3) | |
VARIABLES | Log(nacidos vivos con menos de 2500gr) | Log(nacidos vivos con menos de 2500gr) | Log(nacidos vivos con menos de 200gr) |
Tratamiento | -0.145*** | -0.145*** | -0.145*** |
(0.0164) | (0.0164) | (0.0138) | |
Efectos fijos de municipio | No | Sí | Sí |
Efectos fijos de año | No | No | Sí |
Constante |
1.253*** | 1.271*** | 1.354*** |
(0.0413) | (0.00935) | (0.0162) | |
Observaciones | 23,142 | 23,142 | 23,142 |
R-cuadrado | 0.054 | 0.327 | |
Número de municipios | 1,120 | 1,120 | 1,120 |
Errores estándar robustos en paréntesis | |||
*** p<0.01, ** p<0.05, * p<0.1 |
Los resultados encontrados sugieren que la despenalización del aborto ha contribuido a reducir la maternidad de mujeres adolescentes, y que el estado de salud de los recién nacidos, en general, es mejor. En medio de un tema que siempre ha sido controversial, estos resultados muestran que la sentencia de la corte constitucional ha cumplido un papel importante en la ampliación y el ejercicio efectivo de los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres colombianas.
Referencias
Angrist, Joshua D. and William N. Evans. 2000. “Schooling and Labor Market Consequences of the 1970 State Abortion Reforms.” In Research in Labor Economics, 75–113. Emerald Group Publishing Limited.
Barrantes Freer, Alonso, Jiménez Rodríguez, Milena, Rojas Mena, Betzabé, & Vargas García, Ana. (2003). Embarazo y aborto en adolescentes. Medicina Legal de Costa Rica, 20(1), 80-102. Retrieved February 17, 2020, from http://www.scielo.sa.cr/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1409-00152003000100009&lng=en&tlng=es.
Corte Constitucional, Sentencia c-355/06
Figlio, David, Jonathan Guryan, Krzysztof Karbownik, and Jeffrey Roth. 2014. «The Effects of Poor Neonatal Health on Children’s Cognitive Development.» American Economic Review, 104 (12): 3921-55.
Jiménez González, Clara. (2017). Efectos de la despenalización del aborto en la tasa de natalidad en Colombia, Maestría en economía de las políticas públicas. Universidad del Rosario.
Klepinger, D., Lundberg, S., & Plotnick, R. D. (1995). Instrument selection: The case of teenage childbearing and women’s educational attainment (pp. 1077-95). University of Wisconsin-Madison, Institute for Research on Poverty.
LeGrand, T. K., & Mbacké, C. S. (1993). Teenage pregnancy and child health in the urban Sahel. Studies in family planning, 137-149.
Mølland, Eirin. 2016. “Benefits from Delay? The Effect of Abortion Availability on Young Women and Their Children.” Labour Economics 43 (December): 6–28. doi:10.1016/j.labeco.2016.06.011
Urdinola, B. P., & Ospino, C. (2015). Long-term consequences of adolescent fertility: The Colombian case. Demographic research, 32, 1487-1518.
Vargas Trujillo, E., Florez Nieto, C. E., Cortés Cortés, D., & Ibarra Avila, M. C. (2019). Embarazo temprano: Evidencias de la investigación en Colombia. Ediciones Uniandes-Universidad de los Andes.