La distribución del ingreso es un tema candente estos días, a nivel global, regional y nacional. Localmente, el gobierno sostiene que las mejoras en la distribución del ingreso son uno de los grandes legados del kirchnerismo. En esta nota voy a describir la evolución de la distribución del ingreso laboral de los trabajadores argentinos en los últimos veinte años mirando los retornos a la educación.
La evolución de la distribución del ingreso en la Argentina es un tema del que ya se ha escrito en este blog. Hace un año, Lustig y Pessino, describieron la caída en la desigualdad de ingresos en Argentina, distinguiendo los factores de mercado y las políticas distributivas. Los primeros, cambios en la distribución de salarios y en la tasa de empleo, analizados aquí por Sebastián Galiani, explican la mayor parte de la caída de la desigualdad. En esta nota voy a focalizarme en la distribución de salarios, mirando la evolución del salario relativo de trabajadores con distinto nivel de educación en Argentina.
El siguiente gráfico, cortesía de Hugo Ñopo del BID, describe los retornos a la educación en 1995, 2001 y 2009 para Argentina (usando datos de la encuesta armonizada de hogares del BID), medidos en puntos logarítmicos[1]. Viendo el gráfico observamos que en la última década efectivamente los salarios en Argentina son menos desiguales: la diferencia entre los salarios de los mas educados y los menos educados cayó. El gráfico muestra que la reducción en la brecha entre lo que ganan los universitarios y los que tienen primaria o secundaria completa obedece a la reducción de los salarios relativos de los universitarios.
El retorno a completar siete años de educación es aproximadamente 0.4 puntos logarítmicos todos los años, lo cual quiere decir que una persona con primario completo gana aproximadamente 50% mas que una sin ninguna educación. Quien termina el secundario ganaba 2.45 (0.9 puntos logarítmicos) veces más que alguien sin educación en 1995 y 2001. Este retorno cae a 1.82 en 2009. Combinando estos resultados vemos que el retorno de completar el secundario en relación a completar la escuela secundaria pasó de 65% (0.5 puntos logarítmicos) en 1995 y 2001 a 35% (0.3 puntos logarítmicos) en 2009. Terminar la universidad pagaba aproximadamente 5.75 (1.75 puntos logarítmicos) veces el sueldo de alguien sin educación en 1995 y 2001, pero sólo 3.5 (1.25 puntos logarítmicos) en 2009. El premio a la educación universitaria (en relación al secundario) cayó de 130% a 92% entre 2001 y 2009.
¿Es esto una buena noticia? No lo sé. Mi impresión es que esta caída se debe más a una caída en la demanda de empleados educados más que a un aumento de la oferta, lo cual interpreto como una mala noticia en un mundo en el que los retornos al capital humano en países desarrollados están creciendo (ver para EEUU).
Este fenómeno no es una particularidad de la experiencia argentina. Hugo Ñopo, en este blog, recientemente nos mostró que un fenómeno similar se ve en Colombia y el siguiente gráfico nos muestra el resultado de hacer el ejercicio hecho en el primer gráfico para Argentina para una muestra representativa de la población de 12 países de América Latina[2].
Notas:
[1] Un valor de x en el eje vertical corresponde al valor ex.
[2] Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Nicaragua, Panamá, Perú, Uruguay.
Si los años de educación reflejan diferencias preexistentes de clase o status, la disminución de la brecha puede ser algo positivo. La implicancia es diferente si consideramos la relación entre educación y «premio» como exógena. En esa historia, el deseable rol igualador de la educación se ve debilitado. En consecuencia, antes de sacar conclusiones, sería interesante adjudicar entre las dos interpretaciones.
Rubin, todas estas cosas son endógenas y están inter relacionadas. Por ello es difícil sacar conclusiones. Si la reducción del premio es una consecuencia del aumento de la oferta de trabajadores con título universitario seria una noticia muy distinta de una caída en la demanda. Hay que estudiar más el tema. Igual, los cambio en la oferta (stock de trabajadores, no flujo de entrantes) son lentos.
Quizás esta viendo una caída en la calidad educativa en argentina, lo que estaría de acuerdo con las PISA y reflejaría la caída en la calidad de la educación en las universidades que se comenta, supongamos que a los lideres lo asesoran lo mejor de nuestra clase intelectual, visto así el resultado seria consistente. O simplemente pensemos que en argentina se discute, si este modelo mejoro algo poquito o nada la desigualdad, como analiza al principio, en el mismo momento en que la sensación de inseguridad aumenta, siendo este un factor asociado al aumento de la misma. Por supuesto esto siempre es en promedio, así que no se preocupe a Ud. no le toca.
Saludos.
Quizás pueda explicarse también por el menor poder de negociación de los empleados no sindicalizados en un escenario marcado por una elevada tasa de inflación. Los trabajadores «no educados formalmente» o con instrucción básica, se desempeñan mayormente en sectores con fuerte nivel de sindicalización. Al subir el empleo formal, los resultados de las paritarias se ven el en salario de los trabajadores (ya registrados). Quienes tienen que discutir el salario personalmente con el empleador tienen menores posibilidades de conseguir aumentos considerables que aquéllos que lo hacen a través de la negociación colectiva.
En una hipótesis interesante. Habría que estudiarla mas. Igual, no se ve tanto un aumento de los salarios bajos como una caída de los altos. También, es un fenómeno valido para muchos países de la región.
[…] humano Estudiar paga menos: la caída del retorno a la educación en Argentina. Financiamiento de la Educación Superior: ni gratis ni debe serlo Drogas Políticas Antidroga en […]
El comentario de Mariano me parece acertado para el caso Argentino, y es un camino importante para profundizar en las investigaciones. El resto de países de AL tienen estructura e incidencia sindical muy dispareja. En Colombia es casi nula la incidencia de la negociación colectiva y los sindicatos hacia la determinación de los salarios de gran parte de los trabajadores.
En relación al tema si es una reducción de la demanda de los calificados, no se, no veo en los datos una reducción de la demanda de calificados. La tasa de desempleo por nivel educativo no es una forma perfecta para argumentar, pero al menos es un canal para mostrar por qué no creo que sea una reducción de la demanda. La tasa de desempleo de los universitarios es casi la misma en 1992 y en 2009 (años del gráfico). Mientras que la de los que tienen sólo secundaria completa paso a ser 9% en 2009 cuando era de 6% en 1992.
Ahora bien, te pregunto ¿por qué es tu impresión que la caída en los retornos a la educación universitaria se debe a una caída en la demanda de este tipo de trabajadores?
Laura, pensa en el equilibrio de un mercado, para simplificar pensá que la oferta es vertical. Si cae la demanda cae el precio y no se mueve la cantidad de equilibrio.
Una explicación de equilibrio también debería considerar un crecimiento en oferta de trabajadores con mayor educación. Es decir, antes era relativamente más dificil conseguir trabajadores con formación superior. Esto también explicaría el aumento señalado por Laura del desempleo en el segmento de educación secundaria completa.
Capaz que simplemente estar en el sistema educativo no sirve realmente para educarse.
Capaz que los sectores económicos de mayor valor agregado están siendo ahogados (impuestos altos, restricciones a la inversión y exportación), y los trabajadores de menor valor agregado se están beneficiando (en relación a su aporte económico) a través de subsidios.
En una sociedad desarrollada, todos los trabajadores se desempeñan en sectores económicos de alto valor agregado (ciencia e ingeniería) o que no pueden ser reemplazados por máquinas (adminsitración y entretenimiento), y las demás tareas las realizan máqunas.
Si se diera esa situación, el beneficio de estudiar más sería enorme. SI ocurre lo contrario, es imposible que la sociedad se desarrollo,.
Otra hipótesis interesante que vale la pena estudiar. Dejaría de lado el tema de los impuestos h el clime de negocios porque el mismo fenómeno ocurre en países mas «amigables» al mundo empresarial
Si en 1995 y 2001 la desocupación era mayor en los sectores con menor nivel de escolarización, el análisis también puede indicar un reacomodamiento del retorno.
Estimados, los invito a visitar un blog sobre ciencias económicas.
http://mba-argentina.blogspot.com.ar/