Por Daniel Gómez Gaviria, Vicepresidente Consejo Privado de Competitividad Colombia
El Consejo Privado de Competitividad presentó en Noviembre de 2023 el Informe Nacional de Competitividad 2023-2024 (INC2023) y su separata especial. [1] Este año el hilo conductor del informe es la confianza como factor de competitividad. Entendemos la confianza como la certidumbre de que en una relación la contraparte no va a tener comportamientos oportunistas, engañarnos, o sacar ventaja de nosotros en el futuro. En condiciones de incertidumbre y contratos incompletos, la posibilidad de este tipo de comportamientos afecta el tipo de relaciones en las que nos involucramos y los instrumentos que median esas relaciones.
En sus 16 capítulos y la separata, el INC2023 explora como la confianza, o su ausencia, nos lleva a diseñar normas, reglas, instituciones, contratos, y colaboraciones entre actores públicos y privados subóptimas que afectan la competitividad, entendida como todos los factores que nos permiten ser más productivos y lograr mejoras de bienestar.
El norte del Informe, como todos los años, es el aumento de la productividad que se ha estancado y hasta decrecido en los últimos 30 años con contribuciones negativas al crecimiento. [2] Los costos de transacción, la complejización de cotratos, producto de un entorno sin confianza, limita las relaciones comerciales y apuestas de inversión, innovación, y crecimiento y las oportunidades de colaboración efectiva entre actores públicos y privados y también entre privados y entre actores del sector público a niveles nacionales y subnacionales. La desconfianza limita el universo de oportunidades y el potencial de crecimiento tan necesario para reducir la pobreza y mejorar las condiciones de vida de todos los colombianos.
El informe identifica tres estrategias para construir confianza: 1) garantizar certidumbre en procesos y procedimientos; 2) generar espacios de trabajo sistémico y multiactor; 3) tener visiones compartidas de futuro. Los 16 capítulos se pueden clasificar según su temática y según la estrategia de construcción de confianza que enfatizamos.
Cada capítulo detalla el tipo de arreglos que hemos encontrado para resolver problemas de cooperación y coordinación dadas las falencias de confianza que nos impiden llegar a un primer mejor. Quisiera destacar una dimensión particularmente relevante: la naturaleza de la institucionalidad y el diseño de sistemas público-privados.
Desde las reformas estructurales de los 90, el país ha buscado fortalecer los esquemas público-privados desde instancias de diseño y de implementación de políticas, como el Sistema Nacional de Competitividad e Innovación, mediante instrumentos como el esquema de Asociaciones Público Privadas (APP) para la provisión de infraestructura, y desde el diseño de sistemas completos como el de salud y el de pensiones.
Estos arreglos buscan aprovechar las capacidades y recursos del sector privado, junto con mecanismos de mercado, para mejorar la provisión de bienes públicos y meritorios, dejando en manos del sector público lo que realmente no puede hacer el mercado. De esta manera se han cerrado brechas de cobertura, calidad, acceso, en muchas de las áreas de política. Algunas de ellas se enfrentan hoy a discusiones importantes de reforma donde se rebalancea hacia el Estado mucho de lo que se había encomendado a privados mediante sistemas de mercado.
A pesar de los avances en educación, salud, infraestructura, pensiones, quedan muchos retos por resolver e inequidades por cerrar. El Informe Nacional de Competitividad identifica en todos estos temas oportunidades de mejora basados en la mejora de procesos, en mecanismos de concertación y trabajo intersectorial, y en construcción de visiones compartidas de futuro, que permitirían resolver los problemas que persisten sin socavar lo logrado.
A la base de muchas de las dificultades actuales está la desconfianza hacia los sistemas público-privados por no haber logrado un progreso equitativo territorialmente, y a los largo de otras dimensiones de desigualdad, fallas de gobierno en sus funciones regulatorias y casos de ineficiencias y de corrupción. Los sistemas adicionalmente dependen del funcionamiento y aporte del sector público y privado para que funcionen. La desconfianza entre actores junto a reformas que han agregado incertidumbre, ha profundizado las tensiones a las que se enfrentan normalmente esquemas público-privados dificultando aun más el logro de soluciones.
Invito entonces a la lectura del INC2023 y su separata, y a la construcción de reformas que fortalezcan la confianza posibilitando mejores soluciones y un papel sinérgico entre el gobierno y el sector privado para continuar mejorando la provisión de bienes y servicios públicos cerrando brechas entre poblaciones y territorios.
[1] https://compite.com.co/informe/informe-nacional-de-competitividad-2023-2024/
[2] Ver https://www.mckinsey.com/mgi/our-research/investing-in-productivity-growth